sábado, abril 24, 2010

De este lado de allá

Ayer viernes hice mi primer presentación en Tenerife, una de las tantas islas que componen las islas canarias. Antes de la presentación ya me sentía cómodo.
-Estoy en Venezuela?
-Estas plantas son de Nicaragua?
-Por qué hablan como cubanos?
Algunas callejuelas me hacían acordar a calles de Quito, alguna vista nocturna a La Paz. Solo las monedas me hacían acordar de Europa, de hecho me sorprendí más de una vez escuchando un taxista defendiendo el mestizaje, un mozo sosteniendo "que allá en Europa".
La función sucedió en Los Realejos altos, en la casa de la cultura, no había tanto público, pero se fue haciendo grande con el transcurso del espectáculo. Realmente fue un lindo momento compartido. Me llevo el recuerdo del hombre que estaba detrás y que soltó su bastón decidido a estrechar la mano del indio. Fue un gesto de un ímpetu sorprendente, sentí que decía otras cosas, era una forma silenciosa de su grito.
Ahora estoy aquí escribiendo esto, ahí abajo esta el mar, allá arriba hay parapentes dando vueltas sobre el peñón que de va deslizando en casas hasta el mar. Que bueno estar aquí.
Hoy han escrito esto
CAMINO. El titiritero de Banfield.
Publicado el: 24/Abril/2010
Wikio
Superlativo. Eyjafjallajökull (volcánico, asombroso, que genera caos aéreo-cerebral y emocional). Supercalifragilisticoespiralidoso. Todo eso y más en forma de seres de gomaespuma bajo la tutela (o viceversa) del titiritero argentino.
Sergio Mercurio, boby, la abuela, una bailarina, un caminante, un mendicante, un borracho y todos nosotros, espectadores de excepción (porque Sergio nos convierte en seres excepcionales a todos al tener la fortuna, el buen tino y la suerte de poder ver sus creaciones) vivimos el primer día del Festival, en la Casa de la Cultura de Los Realejos, una revelación, un acto de generosidad.
Sergio convierte al público en otro títere, con tanto corazón como el enorme y contundente corazón que alberga cada uno de sus seres de gomaespuma. Eso, y también hace de la esquizofrenia una de las bellas artes, a lo Thomas de Quincey, porque sus muñecos no dejan de ser un 'alter ego' y, sacarlo a relucir, hace que todos nos veamos reflejados o sintamos una empatía natural con ellos, como ocurre con nuestro lado oscuro que todos tenemos. Demoledor Boby; una apisonadora lógica. ¿Y la abuela? ¿Y la abuela? ¿Cómo se las hace para componer parejas... ¿imposibles?: la hermosísima maestra con aquel joven casado "¡pero si da lo mismo, aprovehcen, aprovechen!" La preciosa taquillera con el elegante concejal; "¡venga, hombre venga, que la vida son cuatro días!"...
¿Y el borracho a sorbo de doradas, con su amiguete Antonio, o su enamorada de honesta carcajada... ¿Y... qué buscaba aquel mendigo que las luces teñían de rojo trágico... Monedas, un abrazo...?
Y hubo más, y más y más... Poesía en estado puro, risas, universos que hacen del joven caminante un átomo diminuto y sin respuesta, y casi sin pregunta...
Por supuesto que iremos a charlar con él, el lunes, y el jueves a ver su película. Y tal vez lo sigamos siempre y para siempre en su recorrido por el mundo.
Un sin fin de gracias, titiritero de alitas en los pies.

No hay comentarios.: